El entrañable veterinario Juan Lucho se lleva a su consulta a la fiera felina Canela Skin. En cuanto ella despierta de la anestesia, Juan le hace un reconocimiento completo a fondo. Esta fiera tiene la temperatura muy alta y está en pleno celo, por lo que Juan le aplica un certero tratamiento a base de pollazos para satisfacer su irrefrenable deseo sexual.